Pichai agradece a Trump por ayudar a Google en caso antimonopolio

Cara a cara, Pichai reconoció al expresidente: la victoria en el caso antimonopolio tuvo mucho que ver con su administración.

Durante una cena en la Casa Blanca con otros ejecutivos tecnológicos, Trump miró directamente al CEO de Google y preguntó: "Tuviste un muy buen día ayer... ¿Quieres hablar de ese gran día?"

Ese "gran día" fue cuando Alphabet, matriz de Google, añadió 230 mil millones a su valor de mercado tras evitar una división forzosa en un fallo judicial federal.

El caso antimonopolio, iniciado por el Departamento de Justicia en 2020, acusaba a Google de mantener un monopolio ilegal en el mercado de búsquedas. El juez Amit Mehta dictaminó que aunque Google violó la ley, las demandas más extremas del DOJ no estaban justificadas.

Pichai no lo negó: "Me alegro de que haya terminado", dijo entre risas de los invitados. "Fue un proceso largo... Agradezco que su administración mantuviera un diálogo constructivo y pudiéramos llegar a una resolución". Trump simplemente respondió: "Correcto".

Google escapa sin grandes restricciones

El fallo reconoció irregularidades pero rechazó las ideas más severas del DOJ, como forzar la división de Google o impedirle pagar miles de millones anuales a Apple para seguir siendo el buscador predeterminado en iPhones. Ese acuerdo vale miles de millones, beneficiando a Apple y manteniendo a Google en la cima.

El martes, las acciones de Apple subieron 4% tras el cierre, claramente satisfechos con la decisión judicial. La sentencia de Mehta fue contundente: "No se prohibirá a Google realizar pagos u ofrecer otras compensaciones a socios de distribución para precargar o posicionar Google Search, Chrome o sus productos de IA".

Añadió que eliminar esos pagos probablemente perjudicaría a otras empresas e incluso a los usuarios. En resumen, el tribunal no estaba dispuesto a romper algo ya rentable para múltiples partes.

Pero no fue una victoria total. Google deberá compartir algunos de sus datos. Durante el juicio, el DOJ pidió que Google compartiera los datos que usa para generar resultados de búsqueda, especialmente datos basados en clics de usuarios.

El juez aceptó parcialmente. Google ahora debe compartir algunos datos de su índice de búsqueda e interacciones de usuarios, pero no datos publicitarios. Los anunciantes no obtendrán acceso a los conjuntos de datos profundos que esperaban.

Trump vincula victoria a agenda de IA y decisiones pasadas

La cena no fue solo sobre motores de búsqueda. Pichai desvió la conversación hacia la inteligencia artificial: "El momento de la IA es uno de los más transformadores que cualquiera de nosotros haya visto o verá en nuestras vidas", dijo. "El plan de acción para IA bajo su liderazgo es un gran comienzo, y esperamos trabajar juntos".

Se refería al "Plan de Acción de IA de América", lanzado en julio. Un plan de 90 políticas que busca acelerar la innovación, construir infraestructura de IA y promover la dominación estadounidense en IA globalmente. Parte del plan prohíbe herramientas de IA que utilicen "IA Woke" o "dogmas ideológicos como DEI" (diversidad, equidad e inclusión).

Trump también lo politizó, interrumpiendo a Pichai para decir: "Biden fue quien presentó esa demanda, ¿lo sabes, verdad?" Pero los hechos muestran lo contrario: el DOJ presentó el caso mientras Trump aún estaba en el cargo durante su primer mandato. Pichai no respondió.

Ese mismo día, Pichai asistió a otro evento en la Casa Blanca, el Grupo de Trabajo de Educación en IA, organizado por Melania Trump. ¿El objetivo? Mayor presencia gubernamental en políticas de IA. Y aparentemente, Google quiere mantenerse en ese círculo.

Google también enfrenta una demanda separada de Trump, presentada hace más de cuatro años y aún activa. Se centra en YouTube, propiedad de Google, acusando a la plataforma de censura ilegal tras la suspensión de las cuentas de Trump después del disturbio del Capitolio. Ambos equipos legales están ahora en conversaciones.